Al aceptarte tal como eres, con tus fortalezas y debilidades, podrás aceptar aquellos que tienen los demás y será más fácil el respeto a quien antes no podías aceptar.
Los motivos que tenías para seguir peleando contigo y los demás, se habrán terminado, así tu vida dará un salto, pues habrás abierto la puerta del amor y, “Cuando colaboran el amor y la habilidad, hay que esperar una obra maestra”, como afirmó en su momento, Charles Reagan
A. Ursula Goyzueta