Oye a la Fuente hablarte, la cual acalla el estruendo de lo que no tiene sentido y muestra el camino de La Paz a los que no pueden ver. No te dejes engañar por las voces de los muertos que te dicen que han encontrado la Fuente de la Vida y te la ofrecen para que creas en ella.
No tengas miedo de eludir las voces del mundo, no le prestes oídos, aquietate y escucha la Verdad, permanece en silencio, Ella quiere hablarte y darte los milagros, que ya están a tu disposición; no se desvanecerán cuando el sueño llegue a su fin, por el contrario, son los que darán fin al sueño, repárate para ellos.
Levanta el velo que cubre la tierra y despierta a todos los que duermen y no pueden ver; Dios los llama atraves de ti. El necesita tu voz para hablarles, ofrécesela, convirtiéndote en el Portador de todos los milagros para poder expandirlos al mundo, de esta manera, lo liberarás de la creencia de que dar es una manera de perder.
Se el Mensajero de Dios para dar lo que recibes.
María Isabel Burcet
