Hasta el día de hoy ha habido revoluciones. El objetivo ha sido la sociedad y su estructura, y se ha fallado una y otra vez de diferentes maneras. Pero hay que dirigirse al individuo, y no mediante una revolución, sino por la meditación y la transformación. No es tan difícil como pudiera creerse. La gente puede dedicar seis años a estudiar una maestría en la universidad sin pensar que pierden demasiado el tiempo en un posgrado que no significa nada. Todo es cosa de entender el valor de la meditación. Así es posible que millones de personas dejen de estar divididas en su interior. Serán el primer grupo de la humanidad que sea armonioso, y su armonía, su belleza, su compasión, su amor, todas sus cualidades están destinadas a resonar en el mundo.
Dedico mis esfuerzos a que la meditación se aproxime mas a una ciencia, para que no tenga que ver con la religión. Así, cualquiera pueda practicarla, si importar si es hindú o cristiano, judío o mahometano; no importa. Su religión es irrelevante, de todos modos puede meditar. Ni siquiera tiene que creer en ninguna religión; puede ser ateo y de todos modos meditar. La meditación tiene que ser casi como u incendio arrasador. Entonces habrá alguna esperanza.
La gente esta lista: ha estado sedienta de algo que cambie el sabor de la sociedad. Tal cual es: fea, desagradable. Cuando mucho, tolerable. De alguna manera, la gente la ha tolerado, pero tolerarla no es causa de alegría. Debe ser extática, debe ser gozosa. Debe hacer que el corazón de la gente baile.
Cuando las divisiones del interior de una persona desaparecen, todo lo ve con claridad. No es cuestión de conocimiento, sino de claridad. Puede ver cada dimensión, cada dirección, con tal claridad, con tal profunda sensibilidad y capacidad perceptiva, que aunque no conozca, su claridad le dará todas las respuestas que no le da el conocimiento.
La idea de utopía es una de las mas importantes y ha seguido como una sombra a la humanidad durante miles de años; pero de algún modo se revolvió con la idea de cambiar a la sociedad y nunca se contempló al individuo. Nadie ha prestado atención al individuo ni a que es la causa ultima de todos los problemas. Como el individuo es tan pequeño y la sociedad tan grande, la gente piensa que podemos cambiar la sociedad y entonces los individuos cambiarán.
No va a ocurrir así, porque ¨sociedad¨ no es mas que una palabra: sólo hay individuos. La sociedad no tiene alma, no se le puede cambiar nada. Lo único que puede cambiarse es el individuo, por pequeño que parezca. En cuanto se conozca la ciencia de cambiar al individuo, puede aplicarse a todos los individuos en todas partes. Tengo la sensación de que algún día alcanzaremos una sociedad que sea armoniosa y mucho mejor que todas las ideas que han concebido los utopistas durante milenios.
La realidad sera mucho mas hermosa.
OSHO
